Imberbes y estúpidos

De los tantos y muy interesantes comentarios del post La posibilidad de un golpe de estado, recupero éste porque, justamente (aunque coincido con el optimismo de la voluntad, creo que le falta el pesimismo de la inteligencia) pasa de largo, o bien tiene otra visión distinta a la mía, sobre lo que sucedió cuando en la argentina hubo un empate estratégico entre el campo popular y la reacción, en 1.975.
Creo que, al final, siempre desembocamos en la plaza del 73, si quedó la mitad vacía y si en tal caso fue correcto. Y en 1.975.
Sé que lo digo muy por encima y de modo algo rápido y no denso como requiere, pero bue, no tengo hoy justito nada de tiempo hasta que me desembaraze de la generación de plusvalía.
Ahí vamos:

Tux supone que:


Lucas: En líneas generales coincido con varias de tus visiones pero creo que en cierto punto hay una mirada demasiado sobrestimativa del enemigo que el campo popular enfrenta (para no solo hablar del kirchnerismo)y subestima la potencialidad propia.

En ese sentido hay una frase de tu post que me parece sintomática: "Sumemos, algo más, central: la ausencia de organización por parte del kirchnerismo para sortear el desabastecimiento, la inflación en alimentos, las ciudades cercadas, la soberbia patronal. Y alto acá, una chispa contrafáctica: ¿qué hubiese sucedido si tal organización existiera? La Mesa de Enlace hubiera redoblado la apuesta, y ahí, mi dios."

Está claro -desde mi punto de vista- que si la derecha (¿para qué vamos a usar eufemismos como "mesa de enlace"?) desplegó su fuerza como lo hizo fue porque faltaba fuerza popular organizada, que, de haber existido, hubiese puesto en duda y abortado la mayoría de los cortes y el lock out patronal.

Y no estoy hablando desde una visión idealizada ni tampoco desde la posibilidad de propiciar enfrentamientos abiertos, sino de la realidad histórica y comprobada en nuestro país, de que la fuerza popular organizada es principalmente disuasoria.

Desafortunadamente Néstor y Cristina piensa como vos: "¡Mi dios!, si enfrentamos a la derecha hay un mar de muertos". Y creo que pensar esto es la madre de todas las derrotas; desgraciadamente es un reflejo muy natural en nuestra sociedad, fruto de la Dictadura genocida y de esta democracia moldeada por el posibilismo alfonsinista y el individualismo menemista.

En ese marco es inevitable asumir que el único refugio es el PJ y asumir las reglas que imponen desde este sector. Y aquí hay que ser claros, no se trata de cargar las tintas sobre las trayectorias de los intendentes del conurbano sino de tomar nota que hoy alinearse con ellos y con Scioli -por ejemplo- es ponerse a perseguir pendejos en el Gran Buenos Aires. Porque asociarse con Schiaretti es decir -como hizo Cristina hace un par de meses- que todas sus políticas de ajuste (incluido el recorte a jubilados) estaban bien. Porque abrazarse con Jaque en Mendoza implica aceptar su despreciable política de incorporar a represores en sus organismos de seguridad. Y paremos de contar porque sino la lista se hace interminable y suma nuevos "hitos" diariamente.

Y aquí lo grave no es hacer "ladrillos con bosta", sino que al final terminamos comiendo bosta, que es algo muy diferente.

¿Por qué? Porque la bosta no solo es indigesta, sino que a la corta o a la larga te mata.