28 oct 2008

Duchamp dibujando a Lanata


El kirchnerismo como punto de ruptura. Muchas veces me imaginé que el kirchnerismo iba a constituir un clivaje nuevo. Esto, que al calor del intento transversal, recobraba sentido, en realidad, en mí, tenía otro antecedente: el 2001. La caída de las torres gemelas, y la caída de De La Rúa, podían ya pensarse como el agotamiento del neoliberalismo: tanto del modo de globalización nacido de la caída del Muro de Berlín como, en nuestro país, del fin de una era, que terminaba con cierta noción social de la inutilidad de la política, de la inexorabilidad de la victoria conservadora, y el renacimiento, entonces, de la puja por la distribución y la riqueza. Cierto tinte nacional y popular me fue empapando nociones izquierdistas que a mis veinte años ya eran viejas. Un aprendizaje un poco más en serio de la economía, y una mirada no tan apocalíptica de la política, menos de Walter Benjamin, más de Jauretche. Junto con pensar que no es lo mismo que Duchamp le pinte bigotes a la Mona Lisa que a mí se me ocurra tirarle piedras al monumento a Garibaldi. Ya estaban, entonces, las cosas de algún modo, encarriladas, predispuestas.
Pensar el kirchnerismo como punto de ruptura en la historia nacional, entonces, no era difícil: sólo tenía que aparecer. Como Mendieta alguna vez lo planteó (el post no lo encuentro: algo de carulismo se titulaba): podría ser otro quien esto lidere.
La asunción de Néstor Kirchner en la presidencia del pejota, no necesariamente contradice esto, por cuanto, el pejota era una federación de partidos provinciales (¿era? ¿sigue siendo? ¿va en camino de transformación?) y en ese marco fragmentado, sólo es posible su unificación bajo dos variables: o un acuerdo de poder (al modo en que gobernó Menem y Duhalde) donde se negocian identidades y parcelas pero se conserva territorios sin afectar la esencia federativa, o una nacionalización que implique, entonces, una kirchnerización. No es posible una peronización del pejota, porque quien la encarne debe revisar y acomodar los paradigmas peronistas, y por lo tonto, ponerle su impronta personal. Tampoco es posible una ruptura mágica y total de la historia.
De modo que, ahí hay algo en juego, entonces, en el pejota.
Pero también en la oposición: la oposición no puede configurarse como antiperonista sino como antikirchnerista, para que mi hipótesis (nótese que arranqué cuidadoso: ahora, lo que era entusiasmo, ya se transformó en hipótesis) tenga cierto presupuesto.
Pero tanto el oficialismo como la oposición no son en sí, sino en relación (en este caso adversarial) y en las líneas que se trazen de continuidades y descontinuidades históricas, y en un contexto regional y mundial, puntual y que, mirando la región, da cabida (ningún presidente, a excepción de Chile, de los principales países latinoamericanos, emergió de un partido con varios períodos si se quiere alternados en el poder: y casi todos redefinieron las modalidades identitarias partidarias. Brasil, Bolivia, Venezuela, Ecuador, Perú, Colombia, Uruguay, México). En el mundo, que es como llamamos a todo lo que no es bombardeado, a la parte bombardeadora, digamos, en el mundo, ese pequeño espacio, ya hace varios años que se disputa lo que puede definirse en dos polos como multilateralismo (como instancia de equilibrio multipolar del poder con hegemonía occidental) o anglosajonismo (hegemonizado por los Estados Unidos).
Son contextos distintos a los que prevalecieron en los últimos treinta años hasta la caída del Muro de Berlín, y distintos de los años felices de la derecha que van desde la caída del Muro y el socialismo realmente existente y, bueno, este parate, o punto de inflexión.
Quería escribir breve y ya van muchos renglones. Todavía tengo que hacer un trabajo y escribir unas puntillosas 1.500 palabras, así que otro día o en otro momento sigo.
Perdón, reabro este post: buscando a la Mona Lisa por Marcel Duchamp encontré este hallazgo memorable: no es ni más no menos que el compañero de revista de Ximena Capristo. ¿Qué me cuenta Osito Maipo, a lo que llegó el dadaísmo?
Mendieta dijo...
Acá ta:

7 comentarios:

Mendieta dijo...

Acá ta: http://mendietaelrenegau.blogspot.com/2008/06/en-la-plaza-si-el-pueblo-est-sera.html

caca dijo...

Es excelente el análisis, sólo agregaría que la oposición, tenés razón, sólo se puede estructurar como antikirchnerista y no como antiperonista. Eso está bien. Pero también creo que si se pueden establecer más que nunca una masa de ciudadanos que son más antiperonistas que antikirchneristas ya que ven en kirchner al primer perón y a cristina en eva. Y eso miedo al pasado que los obligó a ser más solidarios les recomienda ser opositor a ultranza -movilizados si es posible- antes que sea tarde y tengan que inventar los cuarteles, y ponerles una puerta, para después poder ir a golpearlas.

Anónimo dijo...

A ver si me sale.
Si el peronismo fue el hecho maldito del país burgués,
podríamos decir que el menemismo fue el hecho maldito del peronismo, aún más que la Triple A.
El kirchnerismo es el hecho maldito del progresismo blanco, porque le quita razón de ser, se sentían más cómodos oponiéndose a Menem o De la Ruina o incluso Tachuelín.
Para ser, el kirchnerismo necesita llenar su bolsa de gatos. Después de todo,esos gatos ganan elecciones y tienen territorio.
Para los que se les caen los anillos de tener ciertos aliados, les diremos que antes de la ética de las alianzas está la ética del proyecto de gobierno. Mientras no se traicione ese proyecto, deberemos saborear los batracios que se nos presenten, porque la alternativa para el país es gente que vende los adoquines de San Telmo, o un derivado tachuelesco que lleve el dólar a 4 mangos, mandando al joraca la recuperación del poder adquisitivo lograda en los últimos 5 años.
Tal vez sea verdad que el kirchnerismo en este punto -no en los que le endilgan- corra para adelante en el tema de las alianzas. Quizás con la esperanza secreta de que los monitos se vayan descartando solitos. Aunque debemos decir que los chicos no tienen alternativa potable en sus distritos. Tal vez Juez podría haber sido, pero no mucho más, Jaque en Mendoza fue más un enroque, si me permite el chascarrillo fácil.
Es lo que hay, y no hay muchas alternativas. A mí me encantaría Victoria Donda gobernadora pero no mide.
Contra lo que algún chicanero pueda pensar, esto no habla mal del kirchnerismo. Para mí es todo un mérito que con esta gente de aliada hayan construido las conquistas que se lograron

caca dijo...

Victoria Donda gobernadora es un grano en el orto del bienpensar!

Me encantó eso del menemismo.

El menemismo es el maldito hecho burgués del peronismo.

pupi espinoza dijo...

Victoria Donda gobernadora! muy buena idea,linda,inteligente y de las juega por los interese populares.Lo lleva en la sangre.
Ayer con Cecilia Merchán largaron la campaña de:"Distribuir la riqueza es posible' montón de referentes nac&pop apoyan la nueva ley de impuestos a la renta financiera que es la columna vertebral de la campaña nacional que ayer arrancó:www.libresdelsur.org.ar
Saludos!

pupi espinoza dijo...

Che Lucas,viste el aviso de la cadena Ser,la radio española del grupo Prisa (diario El País Radio Continental en argentina )en el portal de Critica digital? Lanata participando en una mesa redonda con Varguita.Asociados a Prisa o ya la compraron?.Si pinchas el aviso podés escuchar la radio española que mas ha combatido el gobierno K.
Poderoso caballero Don Dinero,he!Lanata.

Unknown dijo...

Ahí subí elenlace de Mendieta para que se pueda leer.

Natanael: cierto, pero no creo que se superpongan ambas identidades, incluso, es probalbe que algo de esto tenga que ver con la sobredeterminación del "estilo" como causal opositora a medidas puntuales, como modo de englobarlo.

Aguiante Jauretche; me parece muy claro tu comentario, Incluso me hizo pensar más seriamente en este hincapié en las alianzas (que en mí se fue diluyendo, pero no en otros grandes compañeros como, por ejemplo, Libres del Sur y otros). Es interesante pensarlo más.
Y lo del menemismo como hecho maldito del peronismo es un acierto gramatical.

Pupi justo estoy analizando un proeyctod e ley en Entre Ríos que pide la eliminación de un impuesto del 1,5% por sobre los depósitos que no se presten descontado el encaje del Central, encima es del Ministro de Economía el proyecto.

No sabía eso de Lanata, ya lo busco, aunque no me sorprende, en fin...,