Dos medidas por día para expectativizar el consumo, y ojo, que si queda algo, también hay para que los que no hayan nacido con el derecho de tener expectativas, o cuanto menos de ser relevantes para un economista serio, puedan manotear el plan zeta, o el doble ve. Tampoco se desesperen, calma, loco, no hay que ser ansiosos, ahora el Néstor, cada vez que se junta con algún impresentable es para que Cristina largue una medida para los sectores expectatibilizables porque, se sabe, las expectativas de consumo de la gente que consume y tiene miedo sino deja de consumir y todo eso, bue, te decía: la onda es que se les pueda generar expectativas a los corazones sensibles de la gente que ahora pulula desesperada y alocada como adolescentes ante un recital del último bolazo de Cris Morena en los centros comerciales de la zona que importa de este país, por el resto ya llegará y calma, que en realidad las crisis importan cuando afectan las expectativas y decime una cosa vos, ¿alguna vez tuviste alguna expectativa? No, entonces no jodas.
El termómetro de las expectativas, no medido por el INDEC que es feo y no es creíble, sino por las empresas de comunicación que son neutras y transparentes, indica que la sensibilidad de la gente expectable aún no registra la expectación, de modo que se necesita incentivar aún mucho más, con Kasssssh obviamente, a la gente expectable de modo que intercale cada vez que piense andate conchuda algo así como bueno, pero tengo heladera nueva.
Todo este modo progresista de asegurar rentabilidad empresarial está quitándoles banderas pero qué inteligentes a la derecha progresista y si seguimos así mirá a dos medidas por semana para la gente que importa (la que tiene expectativas, y las perdió mirando la CNN, pobre gente!) creo que vamos a lograr sostener las expectativas que vamos, en el fondo es lo que de verdad importa. Todo lo demás es demagogia. Eso sí, a los que nos gusta que el estado tenga injerencia en la economía y sabemos que eso trae quilombos y roscas y lobbies y peleas duras con las corporaciones extorsivas no entendemos cómo los sectores expectables del andate conchuda todavía joden y rechazan este estado que les da de comer y esa heladera nueva y la tarjeta de crédito que todos sabemos es como una segunda esposa, besito a la tarjeta de crédito, a ver todos con la tarjeta de crédito en la mano dios la bendiga a ver: te quiero mucho, tarjeta, en serio. No podría vivir sin vos, sos como la luna reflejada en el mar y otras cosas cursis sos una canción de alejandro sanz: ayyyy, tarjeta, qué sería de mi felicidad en cuotas, mis sueños frustrados, mis ansias irresueltas, sos un diván y sos divina, te quiero. Posta.
Si no fuese por la racionalidad política del 45 por ciento de los argentinos sin expectativas el sector que sí tiene expectativas estaría viendo cómo mierda pagar las deudas que contrae o a quién cagar para sostener su nivel de vida y se sabe que si esa gente se enoja te cortan las rutas y nada de caaaaaooooos en el tránsito sino miren esta buena gente sólo quiere tener un diálogo a solas con la presidenta andate conchuda y ahí se pudriría todo y por eso junto a los revolucionarios como giustiniani y macaluze y pinedo y cobos votamos medidas que favorecen a los trabajadores. Pero a los trabajadores que tienen expectativas, obvio, papá.
4 comentarios:
Carrasco, en un primer momento me dieron ganas de reirme... al final casi me largo a llorar.
Esperemos que venga algún centro para el lado de la justicia porque viste, los morochos no comen discursos en la puerta de la Esma (discursos que defiendo con uñas y dientes pero que, lamentablemente, no tocan la tortita, no?)
Voy a consultar con los chicos de la Cámpora a ver que están escribiendo en sus remeras pre-veraneo Villa Gesell. Por ahí se viene plus salariar único de 20 pesos para comprar turrones.
Saludos pesimistas
¡Lucas Carrasco auténtico periodista gonzo argentino expectoremos las expectantes expexatxtivas taxi taxi joya remise khlaslhgaslgas!
Lucas:
Por eso rompo tanto para que las políticas sean estables: para que la gente sepa a que atenerse.
Hay que pensar como se construyen y por que mecanismos las hacemos estables, que se sigan aun con cambios de administraciones. Es fundamental encontrar consenso en su definición para ser un país confiable.
sUPUESTAMENTE hoy, Urribarri iba a los anuncios en la Casa Rosada, que se esperaba sean para desocupados. Pero, no sé, hoy la coyuntura por la liberación de criminales, me parece puede haber cambiado.
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